Spiga

reunión de apoderados.

para variar llego tarde, menos mal hay bullicio que hace que mi entrada sea piola. Me arrepotingo en mi asiento y una gordita de cabello crespo y negro lee la biblia, le pone talento la ñora. Luego el profe, de movimientos torpes y mirada fija hacia la nada, intenta que los apoderados participen en el hermoso tema que toca la biblia con tanta sabiduría. Al no lograr nada, palabrea un par de frases al aire sin conexión unas con otras y pasa una hojita, la que debe ser respondida y compartida con los demás. Yo tengo pajita (flojera), así que no me muevo, tal vez mire la muralla para ver como transcurre el tiempo. La gente timidamente comienza a interrelacionarse, y empieza hacer más ruido, en tanto, una señora de cabello negro, liso y corto, me pide la silla que tengo al lado, pero cuando se la voy a pasar me dice: "no, gracias, ya no".
Más tarde, mientras el tiempo no corre, otra señora se acerca a mí, de aspecto simpaticona, se sienta a mi lado y me dice un par de palabras gentiles, luego le presto la hojiita para que lea una oración.
llega el momento culmine, el extasis, un alumno se cambia de curso. su madre, por esta causa, hace un discurso, que se llena de lágrimas, de flores, de aplausos, etc. su discurso es tiernucho, y pletórico de buenos deseos. mientras tanto la señora del lado esta tellible (muy) metía (metida, con preguntas) de que mierda estoy escribiendo. Entre tanto, me cobran los $150 (25 cs. de dolar) del café y el conejito (un dulce de la zona), igual estaba (estaba) rico (sabroso), así que no puse mala cara.

Lapsus....

de repente, aparece un niño flaco, alto, pálido, con polera de maldad y un rostro poco agradable. no se ve un tipo muy agraciado. es el presidente de curso, está medio nervioso, comenta unos problemas del curso y se va. de contraparte aparecen los papás sacando a la luz lo bueno de sus hijos y como deberian portarse, obviamente en estricto orden a las normas.
al fin acaba, una reunión más, que si bien no es la primera ni la última, la batalla fue rendida y ya me puedo virar.
(informe presentado a jefa de familia)

aporte de cronopiado.

p.d. las mayúsculas se han suprimido por decisión del autor.

1 comentarios:

Patorusa

20 de enero de 2008, 18:33

Recuerdo que me dijiste que era un cuento muy fome. Pero creo que no es tu manera de narrar el asunto, el problema radica en que las reuniones de apoderados son muy aburridas. De ahí que encuentro que el cuento cumplió su función, es decir hacerse tedioso y hacer pensar todo el rato ¿qué va a suceder? Sin embargo, es imposible que algo ocurra, porque en esas "benditas" reuniones no pasa nada interesante, a menos que tengas un hijo delincuente o qué sé yo.
Otra cosa que rescato es el lenguaje coloquial, si no supiera personaje quién eres, podría pensar que es como alguien del sur.

Saludos y gracias por los cuentos.