Spiga

s/n



se levantó la polera, sus senos turgentes con afiladas cúspides, desconciertan la mirada del ingenuo espectador. luego, el deslizamiento de sus bragas permiten observar la prominencia de aquella vulva selvática incestuosa.
y el espectador desconcertado se convierte en actor principal de una escena sin preparación. le corresponde la fatiga no esperada pero si conversada. entre gemidos recordaba aquéllas revistas con las cuales sus compañeros se hacían machitos. saltos de aquélla que conoció niña y que hoy es mujer, con su olor a ranciedad de alcohol, pensaba en las maravillosas historias de sus compañeros. todo era un gran revoltijo, una extraña majamama de recuerdos familiares.
fue todo una cosa extraña, ya no pensaba. su pubertad confundida, la pornografía, la incestuosidad... llevaron lágrimas a sus ojos. jamás pensó que aquéllo sería así.
a los días la separación y el silencio total de aquélla mujer ahora totalmente desconocida se iba de su lado.
la historia como se repite, pensaba entre lloriqueos de aquel hombre que lo forzaba y forzaba. pensaba en la niña pequeña que conoció por su madre, su pequeñez y su nunca nombrada paternidad. ya nada sentía por lo que le hicieron, por lo que hizo y por lo que le hacen. todo era una jodida violación, con malditas eyaculaciones de los más fuertes sobre los más débiles e ingenuos.


aporte de cronopiado.

1 comentarios:

Patorusa

25 de enero de 2008, 15:35

Me dio de todo tu cuento. Es muy fuerte, creo que alguna vez leí algo parecido, pero tus imágenes superan todo. Muchas veces me perdí, pero llegaba otra imagen y pff volvía el dolor de estómago. Creo que el lenguaje ayuda a reproducir todo aquello que se guarda, más en situaciones que todo callan.

Saludos!

P.D. Disculpa las mayúsculas, pero tu sabes, a ella cuesta echarlas, son tan agrandadas!